Proyectos aparcados. Entrevista a Saint Blain.

La cantidad de actividades a las que se presta el Círculo Masconato hace que éstas se acumulen, y no siempre llegan a cumplirse en la fechas inicialmente previstas. Un ejemplo de ello es el proyecto, aparcado en el momento actual, de una película sobre el retorno de los Guardianes del Espacio. Nuestra corresponsal Rut Aznar ha entrevistado al artista Saint Blanes, del Círculo Masconato (sección Fernán Núñez), muy interesado en este trabajo.

Pregunta. ¿Desde cuándo pertenece al Círculo Masconato?
Respuesta. Desde hace unos años. Creo que desde 2015 más o menos. Tengo que mirar la credencial, pero recuerdo haber participado en 2016 ya como miembro oficial, pues aparezco en el censo de aquel año.
P. ¿Cómo entró en el Círculo Masconato?
R. Bueno, fue por amistad con Angel McHill, a quien conozco desde los años noventa. Me llamó y me propuso firmemente ser el director de la Sección de Fernán Núñez. Acepté encantado.
P. Su especialidad es...
R. Sobre todo el arte corporativo. Mis colaboraciones han venido siendo las crónicas oficiales, algunas ayudas en guiones y, sobre todo, poner pegas y trabas.
P. ¿Pegas y trabas?
R. Y también panteras. Es mi especialidad.
P. No entiendo.
R. Tigres, leones... y también panteras. Es de El mago de Hoz, hombre.
P. Ya. ya. ¿Cómo conoció a McHill?
R. Éramos compañeros en Las Salinas. Y vecinos. Un día se coló en mi casa, y prácticamente se quedó allí. Siempre lo ha hecho, lo de colarse; y lo sigue haciendo.
P. ¿Desarrollaban alguna actividad artística por entonces?
R. Lo más artístico que hacíamos era comer en El Asqueroso, un local cultural que acogía a gente muy inquieta. Los cubatas eran baratos. Allí coincidíamos con Thomas R. Chánchez, un auténtico bandolero. Un tipo peligroso. Y con otros más que no vienen al caso. De todos ellos aprendimos mucho. En aquella época teníamos una clave para quitarnos de en medio cuando la situación cultural no nos agradaba. Decíamos muy perplejamente "esto es muy bonito" y ya sabíamos que había que salir corriendo de donde fuera, ya fuera una exposición, una película o una conferencia sobre el habla de Cádiz.
P. ¿Recuerda bien los inicios?
R. Sí. En realidad, la idea del Círculo le venía rondando a Angel McHill, creo, desde el domingo que comió pollo con arroz dos veces a mediodía. Aquella indigestión le causó un gran sopor. Cuando horas más tarde pudo articular palabra dijo algo de una Academia de la Manteca Colorá. Nos explicó que fue un proyecto cultural de juventud que debía recuperar de algún modo. El Círculo es continuación de aquello.
P. ¿Y usted marcha para Córdoba en...?
R. En el 94.
P. Pero el contacto siguió.
R. Sí, sí. Entre otras cosas porque se seguía colando por casa.
P. ¿Qué echa de menos de Cádiz?
R. ¿Aparte del Asqueroso? Sobre todo las reuniones en el Bar Bartolo de la Casería. Allí se iniciaron muchos rotundos poemas, proclamas y declaraciones vitales. 
P. Háblenos del proyecto que más le entusiasma ahora mismo. Al parecer hay que aplazarlo unos meses.
R. Sí. No cabe en la agenda del Círculo de forma inmediata. Pero no importa. Terminará llevándose a cabo, ya que pondremos mucho empeño.
P. ¿Por qué los Thunderbirds?
R. Por cabezones. Es una de las series de nuestra infancia. Además, me he pedido un papel que puedo clavar. Estoy muy contento.
P. ¿Nos puede decir cuál?
R. No, no puedo. Estamos bajo secreto de rodaje y no puedo revelar nada.
P. ¿Nada?
R. Bueno, lo único que puedo confirmar es que no haré de Milady. Creo que ese papel le toca a Dela Telajinca.
P. Otro miembro muy especial del Círculo. 
R. Sí. Hicimos muy buenas migas en la convención de Galaroza esta pasada primavera.
P. Bueno, les deseo a todos que el proyecto llegue a buen puerto.
R. Muchas gracias. La mantendré informada. Quedamos en unos meses. Adiós.

                                                                                                        Rut Aznar
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Asesinato en el Corriente Exprés: ya ha comenzado la producción.

Si bien el rodaje real con los actores aún no ha comenzado, sí lo ha hecho la parte técnica y artística de la producción. Como cualquier superproducción que se precie, se vienen llevando a cabo múltiples cambios debido a la disponibilidad de los distintos protagonistas. Descartada la participación -por problemas de fechas- del galán Gallego Puntocom, han venido a sumarse a esta ausencia, y por el mismo motivo, las de Toña Tatecallá y Pepe Potato, comprometidos a rodar la película La niña de Antequera; en ella, Toña Tatecallá interpreta a la famosa tonadillera, mientras que Pepe Potato dará rostro al bandolero José María El Ponepegas.

Y siguen los contactos con nuevas figuras del Círculo Masconato, a pesar de que nada está decidido aún sobre los protagonistas definitivos. Mientras tanto, el equipo técnico ya tiene lista la banda sonora, los efectos especiales, así como parte del vestuario y mobiliario. Se han producido ya las primeras pruebas con los actores, pero puede haber cambios en el reparto ya que, por ejemplo, a Dela Telajinca le vienen muy bien dos personajes de la historia, por lo que deberá decidirse entre el Dr. Freud y Dña. María de la Olla. Indudablemente, esta elección dependerá de que el guionista se aclare finalmente, ya que tan pronto se desarrolla la trama en un tren como que, otro día, decide trasladarla al Benito Villamarín. Hemos podido acceder a una de las pruebas sobre los créditos iniciales de la película; pero, sin duda, habrá cambios.

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